Durante todo el proceso hay una relación muy estrecha entre el productor jefe y el cliente, con el fin de personalizar y ajustarnos al máximo a las necesidades específicas de cada trabajo. Se llevan acabo reuniones previas, visitas técnicas, análisis de las necesidades técnicas de cada espacio, planimetría, y puesta en marcha. Tanto en el montaje, el directo y el desmontaje, está el productor jefe, un jefe de equipo de cada sector (iluminación, video y sonido) que velan por que salga todo adelante con el mayor éxito posible.